La seguridad pasó a ser un tema clave para las empresas y abrió un nuevo mercado. El índice de accidentes laborales en la actividad petrolera viene disminuyendo paulatinamente en el país. Esto sucede, fundamentalmente, por dos motivos: mayores controles y sanciones, y una toma de conciencia por parte de las empresas. Además, los incidentes que se registran son de menor gravedad.  En una actividad donde los riesgos son altos y variados (gases tóxicos, descargas eléctricas, manipulación de herramientas pesadas, caídas en altura), contar con los elementos de seguridad y, sobre todo, tener una logística de prevención es fundamental. Se verificó entonces un cambio de paradigma y las empresas han entendido que el cuidado de la salud, la seguridad y el medioambiente es una inversión más que un gasto.

La teoría de la pirámide accidentológica dice que, para que ocurra un accidente fatal, antes tuvieron que suceder 30 accidentes con pérdida de días, 300 sin pérdida de días, 3.000 incidentes y 30.000 desvíos. En 1999 se registraron 8,25 accidentes (sumando los que implicaron pérdida de días, tareas restringidas y fatalidades) por cada millón de horas de trabajo, mientras que esa cifra disminuyó a 2,63 en el 2010.

Una de las primeras empresas en la provincia dedicadas al rubro seguridad fue Distribuidora Neuquén, que comenzó en 1967 con la recarga de matafuegos y fue incorporando la venta de indumentaria y elementos de seguridad. Hoy, a través de su subsidiaria Inseco SRL, también brinda capacitación y mediciones de todos los parámetros ambientales.

En cuanto a seguridad operativa, se determina la necesidad de uso de elementos de protección personal y su correcta selección, se asesora en la adopción de medidas preventivas adecuadas a los distintos riesgos, entre otras. También se evalúan las condiciones ambientales como ruidos y vibraciones, niveles de iluminación, carga térmica, análisis de agua o mezclas inflamables.

Daniel González, titular de la empresa, señaló que "la conciencia sobre seguridad que hay en la industria petrolera por el alto nivel de riesgo que existe es mucho más alta que en otros rubros". "He vivido la evolución en el tema desde la década del 60; antes los accidentes mortales eran muy comunes, pero hoy hay sistemas de gestión en seguridad y medioambiente que realmente son un ejemplo".

En cuanto a niveles de seguridad, indicó que en primer lugar está el sector del petróleo y el gas, luego la industria en general, más atrás la fruticultura y recién después la construcción. "Está demostrado en los índices de accidentología", señaló, y consideró que "en general no hay una cultura de la seguridad, se puede ver a diario en la calle. Actuamos reactivamente, todos tomamos conciencia después de que pasa algo grave". Distribuidora Neuquén tiene actualmente 30 empleados. Entre el 80 y el 90% de sus ventas están centradas en el sector petrolero.