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“El límite de inversión del régimen de promoción debería bajar para incentivar la exploración en Mendoza”

20/11/2014 | ARGENTINA | Actualidad | 288 lecturas | 62 Votos



Entrevista con Alejandro Neme, presidente de Emesa




La gobernación de Mendoza acompañó el proyecto para una nueva ley petrolera, pero aún cree que se puede mejorar. El titular de la empresa provincial pide una baja aún mayor en la inversión requerida para entrar al régimen de promoción. Y dice que Emesa tendrá un rol en el desarrollo del negocio en Mendoza.

La creación de Emesa, la empresa provincial de energía de Mendoza, fue el pilar de la política hidrocarburífera desplegada por la gobernación de Francisco “Paco” Pérez. La compañía, presidida por Alejandro Neme, llevó adelante este año una licitación de áreas marginales que fue bien recibida por la industria petrolera. En diálogo con Revista Petroquímica, Petróleo, Gas, Química & Energía, Neme explicó los alcances de ese concurso y detalló los próximos pasos de Emesa.

¿Cuáles son los principales objetivos de Emesa a corto y mediano plazo?, preguntamos al ejecutivo.

La ley de creación de Emesa la consagró como la entidad ejecutora de la política energética provincial, y para ello la dotó de un objeto social amplísimo, que le permite intervenir en todas las etapas de la cadena de las distintas modalidades de la energía. Dentro de ese amplio espectro, una vez estructurado mínimamente el staff operativo de la compañía, nos abocamos en esta primera etapa a trabajar sobre cuatro líneas de acción principales: poner en valor, a través de la actividad exploratoria, áreas potencialmente hidrocarburíferas sobre las cuales la provincia de Mendoza le reservó y transfirió a Emesa los correspondientes derechos exploratorios.

Para empezar a tener resultados en esta tarea, organizamos y lanzamos el Concurso Público Nacional e Internacional N°1, concretando algunos contratos, en el plazo total de siete meses; iniciar el desarrollo de algunos proyectos de energías renovables, en asociación con promotores e interesados del sector privado del medio local y con el apoyo de la Agencia Científica y Tecnológica, a través de las convocatorias de los Fondos de Innovación Tec-nológica que ha realizado; administrar las participaciones societarias que la provincia tiene en las distintas empresas de generación, distribución y transporte de energía eléctrica, con asiento en Mendoza, procurando ser un socio activo, inteligente y que pueda ayudar al Estado a percibir la real actuación de los grupos controlantes y sus gerencias, y también sus reales condiciones económicas y financieras, acompañando las gestiones que resultan en el mejor resultado para el patrimonio estatal hoy custodiado por Emesa; y contribuir a elaborar un plan estratégico de corto, mediano y largo plazo, con acciones concretas, enfocado fundamentalmente a resolver los problemas de infraestructura energética –en especial, eléctrica– que presenta la provincia y preparar a Emesa para que sea la comitente de estas obras, aprovechando las ventajas de poder actuar como un actor económico de derecho privado.

¿Qué balance realiza de la licitación de áreas petroleras que Emesa llevó a cabo este año?


Muy positivo. En primer lugar, desde la caracterización de la gestión del concurso, realizamos un proceso incuestionable, eficiente, exigente y a la vez competitivo, en un tiempo récord en Mendoza, habiendo puesto en vigencia contratos a sólo ocho meses de haberse efectuado a nuestro favor la transferencia de las áreas.

También desde la concurrencia y los resultados: se interesaron en adquirir pliegos 15 empresas; presentaron ofertas siete consorcios sobre seis de las ocho áreas concursadas, y realizada la evaluación de las ofertas, adjudicamos cuatro áreas por un monto de inversión hasta un 20% mayor de lo que habían ofrecido por las mismas áreas las empresas en la denominada tercera ronda, que realizó el Estado provincial en 2011 con un resultado de casi u$s 50 millones de compromiso de inversión en cuatro áreas denominadas marginales.

¿Cuáles son los desafíos más relevantes que enfrenta Mendoza en materia hidrocarburífera?

Mendoza necesita llegar a niveles de producción similares a los que obtuvo en el pasado, revirtiendo más rápidamente la curva de declinación en la producción petrolera y potenciando el crecimiento observado en los últimos años en lo que hace a producción de gas. En ese sentido, a partir de 2012 YPF está marcando el camino, pero hace falta sumar esfuerzos de otras compañías, ya que nuestra estatal tiene un foco muy fuerte puesto en Vaca Muerta, sector Neuquén.

El límite de inversión mínima para acceder al régimen de promoción nacional debería bajar mucho más para promover la exploración y extracción, o la recuperación terciaria en Mendoza, sobre todo en el sur provincial, donde hace falta generar accesos e infraestructura de todo tipo para bajar los costos. Para esta provincia, ese límite debe bajar para incluir todas las áreas con potencial, porque hoy está muy enfocado en Neuquén y en el off shore, en tanto que aquí el riesgo exploratorio y las dificultades geológicas y geográficas son mayores.

¿Qué balance realiza del proyecto de Ley de Hidrocarburos que recibió media sanción del Senado?


Contiene un importante acuerdo entre la Nación y las provincias, y genera pautas comunes. Es un gran avance, y una base normativa indispensable, aunque faltará resolver otros temas que afectan las inversiones. Desde la perspectiva exclusiva de Mendoza y –en mi opinión– para proyectos por debajo de u$s 250 millones de inversión –o sea, para las áreas que no entran en el régimen de promoción–, las provincias deberían poder manejar sus esquemas licitatorios de acuerdo con sus propias realidades.

Para muchas petroleras chicas y medianas, la participación activa de las empresas provinciales que les dan una oportunidad de recuperar la inversión que adelantaron por cuenta de ellas, como es el modelo de Emesa, puede resultar de gran ayuda. Pero para Emesa tiene más potencial ser titular del patrimonio hidroeléctrico que posee y poseerá la provincia que el tema del petróleo. Somos una empresa de negocios energéticos, no una petrolera.

¿Qué proyectos tiene en carpeta Emesa en el segmento de energía eléctrica?

Emesa administra la cartera de acciones que le transfirió la provincia, en cinco de las seis eléctricas en las que participa. Ello nos permite contar con un mayor conocimiento de la realidad y manejo de esas empresas y poner foco en sus problemas que cuando se administraban desde un Ministerio.

Por el lado de promover la generación, tenemos –en conjunto con el Ministerio de Energía– tres líneas de trabajo, todas dentro de las energías renovables: solar, eólica y de miniaprovechamientos hidroeléctricos. Así es como contamos, en combinación con actores privados, con dos proyectos solares de envergadura, un proyecto eólico y estamos generando un plan para poner en valor energético más de 20 potenciales hidroeléctricos de pequeña a mediana escala. Tenemos anteproyectos también en biomasa, en repotenciación de parques de bombas de riego agrícola, en redes inteligentes combinadas con generación solar y generación distribuida.

Finalmente, nos estamos preparando para que Emesa sea un brazo eficaz que permita proceder a la licitación o supervisión de obras de infraestructura de transmisión en alta tensión, que la provincia deberá alentar para poder seguir atrayendo inversiones productivas. En particular, participaremos próximamente de la LAT 132 Kw Nihuil IV-San Rafael y de la LAT 220 Kw Cruz de Piedra-Gran Mendoza.

Fuente: Revista Petroquímica

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