En 2013, con el petr贸leo cerca de los 100 d贸lares y el shale norteamericano en el boom de su producci贸n, las grandes empresas de servicios a nivel global no ten铆an equipos disponibles para traer a la Argentina y terminaron encareciendo la explotaci贸n de Vaca Muerta.

Hoy, las grandes petroleras que act煤an en el mercado dom茅stico, el Gobierno y las empresas de servicio elaboran la presentaci贸n del decreto presidencial que reducir谩 los aranceles a la importaci贸n de equipos para la industria petrolera.

Para las petroleras, la baja de la carga impositiva que se cobra al ingreso de maquinaria y repuestos usados es uno de las patas fundamentales para motorizar el desarrollo de Vaca Muerta. Lo que sucede que es que el posible decreto favorecer谩 a las tres mayores empresas de servicios petroleros del mundo -Schlumberger, Hallliburton y Baker Hughes- que son las 煤nicas que tienen equipos de completaci贸n en Estados Unidos, en donde manifiestan sobrantes por una com煤n baja de la actividad.

El decreto en el que trabajan los Ministerios de Energ铆a y Producci贸n prev茅 una segmentaci贸n en tres grandes grupos de todos los equipos y repuestos alcanzados por posiciones arancelarias que precisa la industria petrolera. Las empresas de servicios podr谩n importar equipos usados pero, en caso de que exista fabricaci贸n argentina de esa maquinaria, deber谩n comprometer inversi贸n a futuro para adquirir esa tecnolog铆a en el pa铆s. En ese sentido, las empresas petroleras deber谩n comprometer una suma equivalente a un porcentaje a definir del al monto total erogado para importar equipos usados, a la adquisici贸n de bienes nuevos fabricados en el pa铆s. Respecto a las al铆cuotas y plazos involucrados, la discusi贸n entre los privados y el Gobierno es relativa.

En la redacci贸n del documento tambi茅n est谩 la Ceph, la c谩mara que nuclea a las empresas del sector, que hab铆a presentado a fines de junio una propuesta al Ejecutivo para modificar los art铆culos 6 y 7, piezas angulares del decreto, que tendr谩 vigencia hasta junio de 2019. El borrador establece que, para obtener el certificado de importaci贸n de equipos usados, las petroleras deber谩n conseguir primero el aval de la Subsecretar铆a de Industria del Ministerio de Producci贸n, que tendr谩 10 d铆as para expedirse sobre la capacidad de provisi贸n local de ese tipo de bienes.

La propuesta inicial de las petroleras era que s贸lo se acepte a los proveedores locales que sean capaces de ofrecer bienes fabricados en el pa铆s con un 80% de contenido argentino. A su vez, las empresas productoras quieren que el compromiso de inversi贸n compensatorio por importar equipos usados empiece a regir reci茅n al quinto a帽o de entrada en vigencia del decreto. Es por eso quiz谩s que aspiran a que, en una primera etapa, se extender谩 entre 2022 y 2027, el compromiso de inversi贸n sea equivalente al 20% del monto total involucrado en la importaci贸n. Despu茅s de 2027, proponen elevar ese guarismo hasta el 50%.

El principal fabricante local de equipos de perforaci贸n y completaci贸n de pozos es la compa帽铆a QM Equipment. La compa帽铆a tiene su f谩brica en Mar del Plata y emplea a m谩s de 230 trabajadores. Secco, por su parte, ensambla equipos para Halliburton. Y Palmero incursion贸 en la fabricaci贸n de fracturadores.

La gran discusi贸n radica en Buenos Aires, en la posici贸n arancelaria que recibir谩n los equipos que integran los sets de fractura, fundamentalmente por las bombas de alta potencia. Las petroleras y compa帽铆as de servicio pretenden que esa maquinaria integre un grupo o anexo reservado para los productos que no tienen fabricaci贸n local y que, por lo tanto, no exigen un compromiso de inversi贸n compensatorio. Representantes del 谩mbito industrial se oponen en defensa de los establecimientos fabriles con capacidad de producci贸n de esa tecnolog铆a.

En 2013, la capacidad de equipos de fractura instalada en el pa铆s era de 100.000 HHP. Hoy asciende a cerca de 600.000 HHP. Se espera que la versi贸n definitiva de la norma se conozca en aproximadamente 15 d铆as.