De acuerdo a la información proporcionada por las autoridades policíacas, la persona que falleció en este accidente laboral fue identificada como Marcelino C. Olivas, quien radicaba en Hobbs, Nuevo México.

La víctima contaba con 32 años de edad y, antes que pudiera recibir auxilio médico, dejó de existir en el sitio de los hechos. Las autoridades indicaron que un grave golpe que sufrió en la cabeza probablemente fue determinante para que el trabajador, originario del municipio de Ojinaga, perdiera la vida prácticamente de manera instantánea.

Los fatídicos hechos ocurrieron aproximadamente a las 11 de la mañana del viernes 6 de marzo en el Condado Eddy, Nuevo México. Tras registrarse la tragedia, las autoridades procedieron a llevar cabo el peritaje correspondiente para establecer las circunstancias en que se originaron los hechos, al señalarse que un grupo de trabajadores laboraban en la nivelación de un pozo, pero la parte superior de la estructura se reventó por la elevada presión e impactó fatalmente al occiso por la espalda, causándole numerosas lesiones.

Aunque otro obrero también resultó lesionado en el accidente y se requirió su hospitalización, sus heridas no eran de gravedad, por lo que se confiaba en que paulatinamente se recuperaría. El sheriff del Condado Eddy, Earnest J. Mendoza, explicó que el fatal accidente ocurrió en un área petrolera que se localiza aproximadamente 11 millas al oeste de la carretera 62/180.

Al suceder el mortal accidente, Marcelino se encontraba con una cuadrilla de trabajadores de la empresa Mesa Well Service que había estado laborando en un pozo propiedad de la compañía Chesa-Peake Oil.