Los petroleros no viven en barrios sino en "campamentos". Son lugares donde prima lo transitorio, una especie de mundo de chapa y cartón que se arma de forma rápida y barata y se barre de un plumazo cuando la tierra ya no devuelve más hidrocarburos y toda la maquinaria se muda hacia otro lugar en cualquier parte del globo.
En Añelo, unos 1.500 petroleros viven en módulos habitacionales, la elegante y moderna forma como se conoce ahora a los tráileres. La arquitectura de estos cajones de chapa se sofisticó de forma marcada: ahora pueden combinarse para armar grandes espacios y apilarse para hacer varios pisos. Algunos hasta tienen revestimiento exterior, por lo que cuesta distinguirlos de una casa convencional.
La pequeña urbe que recibió el impacto de Vaca Muerta no tiene plazas para albergar a la masa de trabajadores que cada dÃa llegan a la localidad. Por eso, aun en espacios no destinados para tal fin, autoriza que se monten estos campamentos.
La firma Nabors fue una de las primeras en instalar decenas de casillas a la entrada del pueblo, por la Ruta 7. El campamento –como casi todos– tiene televisión digital, aire acondicionado y prácticamente todas las comodidades de una casa convencional. TBS hizo lo propio más cerca del centro e YPF montó un gran campamento donde su subsidiaria AESA construye una planta de tratamiento de crudo.
Pero el caso que más sorprende es del Schlumberger. La empresa de servicios petroleros más grande del mundo armó un verdadero barrio de tráileres en el terreno que posee en el Parque Industrial municipal. En un azul pálido, sin demasiado glamour, la estructura emula las viejas construcciones soviéticas donde no existÃa distinción estética alguna.
Los trabajadores duermen allà durante sus turnos. También hay un comedor y espacios comunes. El patio trasero no aporta demasiado a la recreación: al estar en el medio del sector industrial los petroleros conviven dÃa y noche con maquinarias, torres, equipos y chatarra de todos los colores. El tráfico de camiones es incesante y el ruido de los motores no cesa. Por suerte, la mayorÃa de estos módulos son acústicos.
Uno de los primeros campamentos de tráileres fue instalado por Nabors en el acceso este de Añelo sobre la Ruta 7. No sólo Schlumberger optó por armar un hotel transitorio en medio de su playa de operaciones. La firma local Crexell hizo lo mismo a unos pocos metros, esta vez con unidades más modernas y con grandes ventanales. Dicen que las vistas hacia al rÃo Neuquén cuando cae el sol son imperdibles, al menos un estÃmulo en medio de un páramo lleno de fierros. La empresa local de explosivos Mauad también tiene tráileres en el Parque Industrial.
SITUACIÓN IRREGULAR
El intendente de Añelo, DarÃo DÃaz, admitió que no está bien que se armen estos campamentos en una zona industrial y sostuvo que son 1.500 los trabajadores que pasan sus noches en tráileres. "La ordenanza es clara y no se deberÃa hacer, pero tenemos que aceptarlo por la falta de infraestructura", explicó el jefe comunal. Señaló que la expectativa es que con el tiempo el mercado pueda absorber esas plazas en casas convencionales.
"Preferimos que armen esos campamentos y no sumar miles de vehÃculos más a la ruta", enfatizó DÃaz. El intendente sabe que muchos petroleros viven en localidades aledañas y viajan todos los dÃas al campo, saturando las destruidas rutas de la zona.
Pero no todos piensan como el jefe comunal. Hay varios empresarios locales que llevan adelante proyectos inmobiliarios en busca de capturar ese mercado potencial. Desde grandes emprendimientos como el que encaró la petrolera Sima en los cruces de las rutas 7 y 17, hasta el loteo la Forestada, a la salida del pueblo.
Una simple recorrida por la zona urbana permite descubrir decenas de obras civiles, desde plateas para construir casas de a decenas hasta pequeños apartamentos que los vecinos de la localidad construyen encima de sus hogares o en el patio.
"Nosotros creemos que sà hay lugar. El problema es que las empresas prefieren armar tráileres que son más baratos a alquilarnos a nosotros", cuenta un pequeño desarrollador que prefirió el anonimato. Aunque admitió que el costo de rentar un departamento o un dúplex es bastante más alto, señaló que la mayorÃa de los emprendimientos inmobiliarios son de agentes locales, porque lo que el "derrame" quedarÃa en casa.
Los campamentos cuentan con muchas comodidades, como tevé e Internet, sin embargo no todo entra. "Nosotros creemos que sà hay lugar. El problema es que las empresas prefieren armar tráileres que son más baratos a alquilarnos a nosotros".
"El alquiler de una propiedad de unos 50 metros cuadrados amueblada puede rondar los 25.000 pesos por mes", contó el agente inmobiliario. Los tráileres no se mensualizan, pero al fin de los contratos pueden costar menos del 50%.
El costo de un tráiler individual de más de 8 metros de largo y 2,5 metros de alto, según el equipamiento, puede comenzar en los u$s 50.000 o u$s 60.000. Pero en general las empresas no los compran sino que los alquilan.
EL BARRIO DEL SHALE
La Ruta 17, que corre paralela a la 7 pero por encima de la meseta, es un organismo en constante movimiento. Su paisaje cambia todos los dÃas gracias al movimiento de torres de perforación o de cuadrillas de obreros que hacen algún gasoducto.
Pasando el primer barrio que se construyó dentro de lo que será la nueva Añelo, YPF encara la obra petrolera más grande por estas horas. Se trata de una gran planta de tratamiento de crudo que procesará el petróleo que sale de Vaca Muerta.
La obra la realiza la contratista Astra Evangelista (AESA), una subsidiaria de YPF que entre otras cosas se dedica al diseño de obras de superficie. Antes de comenzar con las tareas, la firma montó un pequeño barrio de tráileres que contrató a Modular Homes, una firma argentina que hizo mucha experiencia montando campamentos para el sector minero e hidroeléctrico.
Una instalación similar se hizo en la gerencia de Loma Campana, aunque en ese lugar no duermen trabajadores. En pocos dÃas se montó un set de oficinas con espacios comunes de decenas de metros cuadros y un miniauditorio incluido.
Nadie sabe a ciencia cierta cuál es la población estable de Añelo. En el municipio hablan de 5.000 habitantes, pero en las horas del dÃa la masa de personas crece de forma exponencial. Dónde habitarán los miles de trabajadores que llegarán hasta esta localidad si el desarrollo de Vaca Muerta prospera es un tema que preocupa y que, por ahora, se resuelve con tráileres.
Fuente: Diario RÃo Negro
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