
Dólar más, o dólar menos, las proyecciones para el 2026 en lo que hace al precio internacional del petróleo, sitúan al Brent -la referencia para Argentina- en torno a los 55 dólares por barril , y con un escenario optimista que roza los 60. Esto, dicho sin vueltas, es un escenario de precios bajos , y en el que nada puede hacer ni Vaca Muerta, ni la industria argentina para cambiar lo que es una cotización internacional, en la que por detrás está el interés de Estados Unidos -el principal productor mundial de petróleo y gas- de tener precios bajos que hagan más competitivas sus industrias ante los costos chinos.
Para dimensionar el desplome de los precios que se espera, la última vez que el Brent estuvo en la franja de los 55 dólares fue en 2016, una década atrás , y claro está que también se vio lo mismo en 2020, en el pico de la pandemia. Las tres cabezas de Cerbero: el convencional La primera cabeza del Cerbero de la industria petrolera argentina le ladra al eslabón más débil del sector: el convencional.
Con un precio internacional en torno a 55 dólares, y que se espera que se traslade al precio doméstico de Argentina por paridad de exportación, el convencional cruje por todos lados, ya que prácticamente equipara su costo con su potencial precio de venta. Si el sector ya venÃa golpeado, en este 2026 medidas paliativas como la s uspensión de las retenciones a las exportaciones, y en especial la rebaja de regalÃas y otros impuestos como Ingresos Brutos, podrÃan ser los únicos salvavidas que mantengan a flote un sector donde -paradógicamente- se siguen ubicando la mayor cantidad de empleados del sector petrolero. El impacto en Vaca Muerta La segunda cabeza del can del inframundo le ladra fuerte a Vaca Muerta , y en este caso no es porque sus costos sean como los del convencional, ya que son más bajos. Lo que los ladridos auguran es que las empresas verán reducidos sus ingresos, y si no logran recortar costos de otros lados, deberán reprogramar muchas de sus inversiones. Menos dinero para las empresas de Vaca Muerta, sin menores costos, es simplemente menos velocidad de desarrollo .
Y eso, es un problema también pues no solo se está ante grandes desarrollos como el oleoducto Vaca Muerta Oil Sur (VMOS) a la costa de RÃo Negro, sino también porque Vaca Muerta corre desde sus inicios una carrera en contra de la ventana de uso de los hidrocarburos, en especial del petróleo. El financiamiento internacional La tercera cabeza de Cerbero está más lejos pero no por eso deja de ladrar, y es que corresponde a las casas matrices de las compañÃas internacionales que, ante los menores ingresos que se esperan en todo el sector, revisarán con doble lupa todos sus activos globales, y bajo ese foco estarán las inversiones en Vaca Muerta que compiten por cada dólar con las del resto del mundo. Nuevamente aquÃ, la reducción de costos será la clave para hacer competitivo el shale argentino que requiere más que nunca de los dólares del exterior.
Una competitividad en la que los gobiernos pueden ser una de las grandes claves, reduciendo la alÃcuota de impuestos y cargas, o bien también evitando frenar obras fundamentales que mellan también la competitividad, como se vio durante el fin de semana con la paralización de la obra del oleoducto VMOS ante el incumplimiento de un porcentaje de mano de obra local.
Fuente: Diario RÃo Negro
283 lecturas | Ver más notas de la sección Actualidad