Al respecto, la analista en Consumo Carolina Suárez destacó a surtidores.com.ar que “ la elevación de las tarifas del gas son también un componente que perjudicará el bolsillo de las familias asalariadas que opten por utilizar menos su auto en virtud de un nuevo recorte del poder adquisitivo de los ingresos cuando aún no hay paritarias cerradas en muchas actividades â€�. 

Agregó que sin embargo, el movimiento de precios finales para el automovilista puede variar si el dólar sigue en subida, a la vez que recordó que al igual que sucede con carnes y verduras, que se cambiaron por arroz o fideos, “la nafta premium continúa perdiendo terreno ante la nafta súperâ€�. 

Agregó que “ automáticamente se achica el sueldo y el bolsillo tiene menos capacidad de destinarse a cargar combustible en su automóvil, el efecto se nota a los pocos días en las Estaciones de Servicio â€�. Por su parte, Héctor Polino de la asociación Consumidores Libres, dijo que los combustibles ocupan un tercer lugar junto con los peajes en la incidencia sobre las cadenas de costos, que junto con la dolarización de la economía y los tarifazos, “ repercuten en las industrias, que elevaron los productos, y de los comercios, que los venden â€�. 

A su turno, el titular de ADDUC, Osvaldo Bassano aseveró que “con los aumentos de gasoil, la exigencia para los consumidores se va por las nubes y hay mucha gente en estado real de necesidad porque sus ingresos no le alcanzan para los gastos básicos â€�. Finalmente coincidió con Suárez al momento de considerar que “ cuanto menos nafta compra el automovilista hay menos trabajo para los empresarios pymes y por ende, menos posibilidad de empleo para el trabajadorâ€�.