
A los 89 años, murió el empresario Gregorio Perez Companc, dueño de la alimenticia Molinos RÃo de la Plata y de la energética PeCom, y uno de los empresarios más influyentes del paÃs.
Según el último ránking de la revista Forbes, el magnate es dueño de la cuarta fortuna familiar más grande de la Argentina y está en el escalafón 782 de los hombres más ricos del mundo, con 4.100 millones de dólares.
Nacido en 1934, era un católico devoto, de muy bajo perfil (tanto que tiene muy pocas fotos en público) y fanático de los autos, una pasión que heredaron sus hijos Pablo y Luis. TenÃa fanatismo por la raza ovina Merino y era un gran coleccionista de autos -en su haber tenÃa varias Ferraris-. HabÃa construido una pista de carreras privada en uno de sus campos. Por muchos años, su familia fue dueña - incluso- de un equipo de rally. En todas sus facetas, también se destacó por su veta filantrópica.
Destacan de Perez Companc su agudeza para elegir a sus segundas lÃneas. "TenÃa un talento y una inteligencia especial para esto", subrayaron a ClarÃn desde su entono, haciendo referencia tanto a Roque Maccarone cuando lo nombró al frente del Banco Rio; o a Juan Manuel Forn como número uno de Molinos; e incluso a Oscar Vicente, quien fuera uno de los ejecutivos más importantes de la petrolera del holding.
Otro rasgo que destacan de este cultor del bajo perfil fue que para sus empleados era todo un desafÃo acercarse a charlar con él porque como solÃa recurrir mucho a las metáforas resultaba difÃcil entender qué era lo que realmente querÃa decir.
Nacido el 23 de agosto de 1934 en Buenos Aires, a los 11 años fue adoptado por la francesa Margarita Companc de Perez Acuña, quien antes de morir, hizo prometer a sus tres hijos biológicos que "Goyo" tendrÃa los mismos derechos que a ellos.
El imperio Perez Companc tuvo su piedra basal mucho antes del nacimiento de "Goyo", en una estancia patagónica en 1919. Se dedicaban a la crÃa de ovejas para la comercialización de lana.
"Goyo" entró en el mundo de los negocios de la mano de su hermano adoptivo, Carlos Pérez Companc.
En 1946, la familia compró dos barcazas de la Segunda Guerra Mundial a Estados Unidos, con las que crearon su propia empresa naviera. (...)
Fuente: ClarÃn
884 lecturas | Ver más notas de la sección Actualidad